Pero un dia, el gigante aburrido de estar solo y ver que en el jardin no había ni una triste flor, se arrepintiò de haber prohibido a los niños jugar en èl, entonces quitó el cartel y la tapia.
Los niños enseguida fueron a jugar y las flores volvieron a salir, los arboles florecieron y los pajaros volvieron a cantar.
Carmen Estela
Querida Carmen. Me ha gustado mucho tu final del cuento : EL GINGANTE EGOISTA. No te ha faltado ningún detalle, lo que más
ResponderEliminarme a gustado a sido cuando has hablado de las flores. Te doy un 10 de nota.
TE FELICITA TU AMIGA VICTORIA
Carmen, lo has hecho muy bien, yo solo había escrito un reglón y medio, tienes mucha imaginación para los cuentos; podrias llegar hasta escritora. Sigue así y nunca pierdas esa imaginación que tienes.
ResponderEliminarMiriam
Gracias a las dos, y seguire escribiendo mucho aunque vosotros tambien escribis muy bien gracias.
ResponderEliminarme gusto el final sigue así y de grande podrias ser una escritora
ResponderEliminarme salvaste de una muchas gracias
ResponderEliminarMe encantó 😚😚
ResponderEliminarMe encantó ����
ResponderEliminarQue gran final
ResponderEliminarMuy buena tu narrativa. Gracias por compartirlo.
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